domingo, junio 18, 2006

Etiqueta en el gym

Nunca he sido muy afecto a los gimnasios, no conozco el nombre de los aparatos, ni de los ejercicios, no me sé el nombre de los músculos y alzo los hombros, así como una ceja cuando alguien me habla de proteínas, aminoácidos, etc. Voy al gimnasio porque era un cerdo y no quería seguir así, por cuidar mi salud y porque me desestresa bastante. Los consejos que enlisto a continuación reflejan mi opinión sobre algunos aspectos que veo cada vez que voy, espero que a alguien le sean de utilidad, con el objeto de lograr una mejor imagen y una adecuada convivencia.

  1. No seas paranóico: A menos que estés usando calentones en los tobillos tipo flashdance y un paliacate enrollado alrededor de tu cabeza, la mayoría de las personas están concentradas en sus actividades, así que… tranquiiilo, a menos que de plano seas un fenómeno de circo, la gente no va a estar al tanto de lo que haces, si levantas una miseria de peso, si tienes brazos colgantes de tortillera, etc. (Por cierto, en el gym al que voy sí hay un fenómeno de circo, a ver si luego le puedo tomar una foto y les enseño… jojojo).
  2. Vístete para la ocasión: Evita la ropa rota, desgarrada o la que ya se transparenta por tantas lavadas, esas garras ya solo sirven para ponerlas en la punta de un palo, rociarlas con gasolina y hacer una bonita antorcha. Tampoco se trata de que vayas super fancy, con peinado de salón (luego ahí andan con lagañas de gel, que se les escurre por el sudor), perfumadísima, con accesorios (eviten los aretotes de candelabro que tan de moda están, cadenas, pulseras, anillos… además de que no va al caso, dejan impregnado el olor en los aparatos y a Blue le molesta, y por consiguiente tiene que ir a lavarse la nariz), y maquillaje… Eso es nefasto, niñas, yo sé que todas las que leen este blog son mujeres guapas (por si no lo sabían este blog solo lo lee gente bonita), de verdad, no necesitan maquillarse y llevar bolsita como si fueran al antro, se ve ridículo y nefasto, sobre todo cuando el sudor (admítanlo, sí sudan) les rueda por la mejilla y parece que se están derritiendo. cualquiera de los dos extremos es malo, hay que saber cómo verse bien en qué lugar y en qué situación, hay ropa deportiva super padre, muy cómoda y de materiales nuevos que te mantienen fresco y a guuuuusto. Señores, yo sé que quieren presumir los músculos, pero las camisetas sin mangas (tank tops) son naquísimas, sobre todo las que tienen estampado anunciando alguna playa, además, no sean desconsiderados, usando esas dejan sudados los aparatos más que si usan una playera “t”. Naquísimo el short de mezclilla, evítenlo, sobre todo si lo hicieron ustedes mismos. A la única persona que le va bien, es a Daisy de los Dukes de Hazzard.
  3. Comunicaciones en el gym: Como en la mayoría de los lugares públicos, es recomendable que tengas tu teléfono o radio en silencio, con la opción de vibrar encendido, para que no molestes al resto de los usuarios con tus tonos “super cool” que bajaste de Internet o te pasó el amigo, esos tonos que piden que contestes el teléfono con acentos raros, con voces de celebridades, o con los hits del momento… recuerda que no a todo mundo le gusta tu música. Es también de muy mal gusto y lo he visto en muchas ocasiones, dada la reciente popularidad de los servicios de radio y los teléfonos celulares con altavoz, el utilizar esta función al estar en un lugar público. No creo que sea tan difícil levantar un poco más el teléfono y pegarlo a tu oído, te aseguro que escucharás mejor y los demás no nos enteraremos de tus importantísimos asuntos, tus múltiples negocios en medio oriente, tu agitada vida social y demás temas de gran relevancia. En serio. No queremos enterarnos. A mucha gente le puede parecer incómodo el uso de los celulares en el área de vestidores, dado que hoy en día la mayoría de los modelos cuenta con cámara, hay que ser discretos con esto.
  4. Si no puedes, no pujes: A menos que tengas genes de Chewbacca y sea tu forma natural de expresarte, puedes hacer el esfuerzo por no hacer tanto escándalo cuando estés haciendo grandes esfuerzos. Es terrible y desconcertante tener que voltear a ver a quién están matando, si alguien necesita ayuda porque le cayó una barra encima, o algo parecido. No sean exagerados señores. Contrólense. Tomen la rienda de sus “emociones”. La mayoría de la gente detestamos a quienes gritan y gruñen de ese modo para llamar la atención.
  5. Mañana sigo con esta lista, si tienen experiencias similares y se les ocurre algun acto de mal gusto en el gimnasio, les agradeceré las sugerencias. Saludos.